
Inspiración: Fábricas y talleres de cerámica en Italia.
septiembre 22, 2024Cada trozo de arcilla que llega a nuestras manos trae consigo una historia que comenzó miles de años atrás.
Antes de convertirse en una taza, una vasija o una escultura, fue tierra moldeada por el tiempo: fragmentos de montañas, cenizas volcánicas, minerales y agua.
Y su color —rojo, blanco, gris, ocre o negro— es una huella de ese origen.
🪶 El lenguaje del color
El color natural de la arcilla depende de los minerales que la componen y del lugar donde se formó.
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Las arcillas rojas contienen óxidos de hierro, que al calentarse se vuelven más intensos, como la tierra del norte de Chile o el sur de España.
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Las arcillas blancas son ricas en caolín, un mineral puro que da origen a la porcelana.
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Las arcillas grises o verdosas suelen tener materia orgánica o sales, comunes en zonas fluviales.
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Y las negras o muy oscuras, con manganeso o carbón, son típicas de suelos volcánicos.
Cada una tiene su personalidad: algunas son más plásticas, otras más frágiles, pero todas hablan del lugar de donde vienen 🌍.
🔥 El fuego transforma el color
Durante la cocción, el fuego altera la composición química del hierro y otros minerales.
Por eso una arcilla que parecía gris puede volverse rojiza, y una blanca puede adquirir tonos crema o marfil.
La atmósfera del horno también influye:
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En atmósfera oxidante (con oxígeno), los colores tienden a ser más cálidos.
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En atmósfera reductora (con poco oxígeno), los tonos se vuelven más oscuros o metálicos.
Así, el fuego se convierte en un pintor invisible que revela la verdadera paleta de la tierra 🔥🎨.

Arcilla y territorio
En cada región del mundo, los ceramistas han aprendido a reconocer y usar los colores de su tierra.
En México, la arcilla de Oaxaca tiene un tono negro brillante; en el sur de Chile, las arcillas rojizas del Biobío se mezclan con arena volcánica; en Italia, la terracotta toscana brilla con un naranja profundo.
Trabajar con arcilla local no solo es una elección técnica: es una forma de conectarse con el paisaje y con la historia.
✨ Inspírate
Si trabajas con arcilla, prueba observar su color antes y después de cocerla.
Mira cómo cambia al contacto con el fuego, cómo se vuelve más clara o más intensa.
En cada pieza, hay un pequeño mapa de la tierra que le dio origen.
Tu obra también puede ser una forma de honrar ese viaje de la materia.
📚 Fuentes y lecturas recomendadas
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“The Science of Clay: Composition and Color”, The American Ceramic Society — ceramics.org
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“Kaolin and Other Clays”, US Geological Survey (USGS) — pubs.usgs.gov
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“Cerámica Tradicional Chilena”, Museo Histórico Nacional de Chile — museohistoriconacional.cl
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“Understanding Clay and Glazes”, The Pottery Studio — thepotterystudio.com
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“Natural Clays and Pigments in Art”, Victoria and Albert Museum (V&A) — vam.ac.uk


